La Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal, anuló el sobreseimiento de un médico imputado por homicidio imprudente por mala praxis.

El hecho aconteció cuando un paciente con obesidad, consultó a un médico especialista en medicina estética, para perder peso. Aquél, sin realizarle ningún tipo de estudio médico, le suministró pastillas para adelgazar. Luego de una semana de tomar la preparación magistral, el paciente comenzó a sentirse mal del estómago hasta que murió, en horas de la noche mientras dormía, por una falla cardíaca.

El tribunal afirmó que el sentenciante sólo se limitó a verificar si la causa del consumo de las pastillas provocó el efecto muerte del damnificado (conocida como relación de causalidad), pero no tuvo en cuenta el deber objetivo que pesaba sobre el profesional en atención al rol de médico que desempeñaba.

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